Hacer autostop, dedo o pedir aventón… son varias los nombres que recibe pero casi todos responden a la misma filosofía: ubicarse en las principales vías de salida de las ciudades o pueblos y señalar con el dedo pulgar para indicar a los vehículos privados que transitan la zona que deseas que te recojan y transporten a otro punto geográfico. Con el tiempo, en algunos países se ha prohibido esta práctica pero en otros pervive como una auténtica tradición usada por oriundos y turistas mochileros que desean un tipo de viaje ‘diferente’ y más económico.
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Uno de los países europeos por excelencia en el uso del autostop para desplazarse es, sin duda, Rumanía. No solo es un método muy utilizado por los habitantes del país sino que aparece como medio de transporte en las guías turísticas de mochileros. La oferta es grande pero la demanda es aún mayor así que prepárate para competir duramente por hacerte con un coche.
¡No lo dudes ni un momento! Si estás planeando un viaje por Lituania sin horarios, sin visitas programadas y con una mochila al hombro, elige el autostop como medio para moverte. Es económico y, aunque no es tan fácil de encontrar como en otros países de esta lista, también está a la orden del día; con un plus, la mayoría de los conductores se pueden enmarcar en esa tipología de ‘personas a las que les gusta dar conversación’.
Por extraño que te parezca existe una asociación conocida como ‘Academy of Free Travel’ que difunde las mejores rutas de viajes con origen Moscú utilizando únicamente el autostop. Un modo de desplazarse que se ha convertido en una auténtica competición entre aquellos que tienen poco presupuesto para pasar sus vacaciones. ¡Es cuestión de actitud!, anuncian en su web. ¿Te consideras preparado?
Hacer ‘dedo’, como es popularmente conocido en Argentina es uno de los rasgos culturales de este país aunque es necesario conocer una serie de trucos para no quedarnos ‘tirados’, algunos de ellos aplicables a otros países: huir de las grandes urbes si tienes en mente realizar un largo desplazamiento y hacer guardia en las gasolineras preguntando a los conductores hacia donde se dirigen.
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Si algo caracteriza a los peruanos es su hospitalidad. Por ello, realizar autostop en este país es relativamente sencillo porque la mayoría de los conductores estarán dispuestos a ayudarte. Es muy frecuente que veas a otras personas identificando mediante un cartel el lugar de destino al que se dirigen. No dejes pasar ninguna oportunidad: coches, máquinas pavimentadoras, autocaravanas, camiones con vacas…
¡Prepárate para una ruta en camioneta! Sin duda, este es el tipo de vehículo más habitual en cuanto a recogida de personas que se encuentran haciendo autostop en este país. El otro consejo es situarte en las entradas o salidas de los pueblos donde se ubican los controles de la policía de tránsito. Obviamente, no cuentes viajar por grandes y modernas autopistas dada la deteriorada calidad de las infraestructuras de la zona.
El autostop es Cuba es el medio más utilizado por sus habitantes para desplazarse. De hecho, a las pocas horas de estar en este país, lo habrás interiorizado como algo habitual y no te llamará la atención. Aunque está popularizado en la totalidad de la isla, las auténticas ‘colas de espera’ se forman en los alrededores de La Habana. Si acudes como turista y alquilas un coche, no tengas ningún reparo en subir a cualquiera de sus habitantes. Eso sí, no lo hagas buscando conversación que ¡no está garantizada!
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