10 puentes de película que no te puedes perder

La magia del cine hace que, cuando viajamos por primera vez a ciudades como Nueva York, tengamos la sensación de que ya hemos estado antes en ese lugar. Y también hace que queramos descubrir nuevos destinos o volver a visitar los que ya conocemos cuando vemos una película o una serie de televisión. Muchas veces nos quedamos colgados delante de la pantalla. Casi tanto como estos 10 puentes de película…

1. Los puentes de Madison

El puente Roseman y el puente Holliwell, en Iowa, no son tan conocidos como otros que aparecen en esta lista, pero tienen su importancia porque son parte de Los puentes de Madison, una de las mejores películas románticas del cine moderno y de la que acaban de cumplirse 20 años desde su estreno. Clint Eastwood dirigió y protagonizó esta película junto a Meryl Streep que cuenta la historia de amor furtivo que viven un maduro fotógrafo de la revista National Geographic y una abnegada ama de casa.

2. El puente sobre el río Kwai

William Holden y Alec Guinness protagonizaban esta película dirigida por David Lean en la que un grupo de prisioneros de guerra estadounidenses debía construir un puente por orden de los japoneses. El puente en el que se rodó esta película, con una de las canciones más silbadas (en el buen sentido) de la historia del cine, está en Tailandia.

3. Tengo ganas de ti

En el cine español también encontramos puentes de película, en unos casos para expresar el amor, como en las adaptaciones cinematográficas de los libros de Federico Moccia, y en otros para una utilización mucho más dramática como en Historias del Kronen, en Madrid. Mejor nos quedamos con Tengo ganas de ti y el Puente de la Princesa de Girona donde los personajes de Mario Casas y Clara Lago sellan su amor con uno de los famosos candados de la saga.

4. Ratatouille

París es famosa, entre otras cosas, por sus puentes, que han dejado bellas imágenes en películas como Los amantes del Pont Neuf, Frenético, Antes del atardecer o Amèlie, pero también en esa joya del cine de animación que es Ratatouille.

5. Misión Imposible

El puente de Carlos, en Praga, era testigo de la trampa que le tendían a Ethan Hunt, el personaje interpretado por Tom Cruise, al comienzo de Misión Imposible, cuando pierde a varios compañeros en una emboscada que termina con su jefe, Jon Voight, precipitándose ensangrentado al agua. La saga de películas de acción no podía tener un mejor comienzo para orgullo de Praga y del puente de Carlos.

6. Manhattan

El puente de Queensboro, que une Manhattan y Brooklyn, es el lugar que contemplaban sentados en el banco Woody Allen y Diane Keaton en una de las mejores películas del actor y director que siempre reserva un papel importante a las ciudades donde filma y, de forma especial, a Nueva York.

7. Godzilla

El puente de Brooklyn, que a veces se confunde con el de Queensboro de la película Manhattan, es otro de los grandes puentes de cine. Lo hemos visto en filmes ambientados en Nueva York tan diferentes como Érase una vez en América, Fiebre del sábado noche, Soy leyenda, Kate & Leopold, Estado de sitio, Wall Street… o la versión de Godzilla del año 1998.

8. Vértigo

El Golden Gate, en San Francisco, es otro de los puentes más cinematográficos. Aparece en películas como El Halcón Maltés, Harry El Sucio, Superman, La Roca, El origen del planeta de los simios o Vértigo, dirigida por Alfred Hitchcock y protagonizada por James Stewart y Kim Novak, y considerada una de las mejores películas de la historia del cine.

9. Indiana Jones y el Templo Maldito

La segunda película de la saga de Indiana Jones tiene una de sus mejores secuencias en el puente donde, aparentemente, no hay salida para el intrépido arqueólogo interpretado por Harrison Ford. Pero claro, si se trata de Indiana Jones, algo se le ocurre para salir de esa peligrosa situación…

10. Hannibal

Si hay otro sitio que merece la pena visitar, ése es Florencia y su Ponte Vecchio. Y si hay algo que no se debe hacer es contratar a un matón para que siga al refinado psicópata Hannibal Lecter (Anthony Hopkins) por sus calles e intente acabar con él. ¿Por qué? Pues porque va a ser Hannibal Lecter quien mate a su perseguidor y también a quien lo ha contratado. Eso sí, antes va a tener el detalle de preguntar si prefiere las tripas dentro o las tripas fuera…

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