Tánger es una ciudad portuaria situada en el extremo norte de Marruecos, en las proximidades del estrecho de Gibraltar. Es una ciudad que esconde rincones preciosos que no debes perderte. Por eso, si vas a viajar a esta exótica ciudad, te explicamos todo lo que ver en Tánger en tres días.
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La ciudad de Tánger atrae a miles de viajeros cada año, los cuales quieren disfrutar de todas las atracciones turísticas que ofrece. Desde su histórica Kasbah con sus antiguas murallas y artefactos históricos y culturales, hasta su Medina con su laberinto de callejones.
En esta ciudad llena de contrastes, donde lo antiguo y lo moderno coexisten de forma armoniosa, es donde podrás disfrutar de una experiencia inmersiva sobre la historia de la ciudad.
Tánger es una ciudad perfecta para visitarla en tan solo tres días. Durante tu viaje, podrás explorar sus callejones llenos de vida, adentrarte en su rica cultura árabe-bereber y disfrutar de lugares tan impresionantes como las Cuevas de Hércules . A continuación, te damos una idea de itinerario que puedes seguir y aprovechar para tener todo planificado para tu viaje a Tánger.
En Tánger tendrás mucho por descubrir. Durante el primer día por la mañana puedes visitar Kasbah, una fortaleza histórica con calles estrechas y tradicionales. La antigua alcazaba tiene origen sobre el siglo X, y aunque con el paso de tiempo ha sufrido diversas modificaciones, no ha perdido su esencia y su poder para transportar a todos aquellos que caminan entre sus calles, a un tiempo más remoto.
Visitar la Kasbah de Tánger, implica recorrer los secretos de sus tiendas, talleres de artesanía entre el aroma a especias que surge de los diferentes restaurantes que esperan servir comida a todo aquel que atraviese sus puertas.
Dentro de La Kasbah, otro de los imprescindibles es el Palacio de Dar-el-Makhzen, un bonito edificio del siglo XVIII. El palacio, el cuál se traduce como Morada del Tesoro, sirvió como residencia de los sultanes de Marruecos durante su estancia en la ciudad
Fue construido en la Kasbah en uno de los punto más alto de la ciudad con vistas a la Medina y al Estrecho de Gibraltar, donde antiguamente habían tenido su sede los gobernantes británicos y portugueses. El palacio está abierto de miércoles a domingo de 10:00h a 18:00h y las habitaciones del Sultán sirven actualmente como sede del Museo de las Artes Marroquíes, que muestra obras de arte de todo Marruecos.
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Aprovechando el momento, también puedes visitar el Museo de Kasbah. En él, podrás pasear por un bonito jardín y contemplar unas vistas excepcionales de la ciudad desde la torre. Si te animas, la entrada te valdrá sobre unos 6 euros.
También por la mañana, puedes pasear por la antigua Medina, un laberinto de callejones llenos de tiendas, cafeterías y puestos de mercado, lugar donde podrás comprar artesanías.
El acceso a la Medina, la cuál aún hoy sigue amurallada, se puede hacer a través del Gran Zoco, una de las zonas más turísticas donde podrás encontrar todo tipo de artículos. El Gran Zoco se diferencia del Zoco Chico, donde encontrarás la verdadera esencia marroquí con artesanía y gastronomía tradicional y local. Ambos zocos están unidos por la Plaza del 9 de abril de 1947.
Durante la tarde del primer día en Tánger, puedes visitar la Gran Mezquita de la ciudad, un imponente edificio religioso de la Medina que está ubicada en la misma plaza que unen a los zocos. Fue construida en 1684 pero este templo ha sido ocupado y modificado por las diferentes civilizaciones que han ido ocupando el territorio durante el paso del tiempo. Nació como mezquita, se convirtió en una catedral portuguesa, y en el siglo XIX, volvió a sus orígenes, renaciendo de nuevo como una mezquita. Además, se cree que el mismo edificio fue ocupado por los romanos porque en ella, se han encontrado restos de un templo romano dedicado a Hércules.
Museo de la Legación Americana
Durante el segundo día en tu viaje a Tánger, puedes hacer una inmersión en la cultura y la naturaleza de la ciudad. Empieza el día en el Museo de la Legación Americana, el primer consulado estadounidense del mundo. Este ofrece una interesante perspectiva de las relaciones históricas entre Marruecos y Estados Unidos.
Si eres de los que les gusta la playa, un buen plan para el segundo día, es visitar Playa Dalia, la cuál está bastante limpia y se encuentra ubicada en un pueblo de pescadores. Aunque está un poco alejada de Tánger (unos 45 minutos en taxi desde la ciudad), merece la pena pasar el día. Está habilitada para personas en sillas de ruedas, tiene zona para niños, la arena es muy fina y el agua, más bien fresquita.
Para terminar el día, puedes pasear por el Parque Rmilat, un espacio verde precioso en el cual hay senderos para caminar y disfrutar de la naturaleza. Te recomendamos subir hasta la cima para contemplar la puesta de sol con unas vistas espectaculares del Estrecho de Gibraltar.
El último del día normalmente es el más corto de todos, pero siempre queda tiempo para aprovechar la jornada. Empieza el tercer día de tu escapada con una excursión en el Cabo Espartel, a unos catorce kilómetros de la ciudad de Tánger. Este lugar ofrece vistas impresionantes del Atlántico y del Mediterráneo y sin duda alguna, es un enclave geográfico singular.
Te recomendamos que vayas por la mañana, ya que suele haber menos gente. Al llegar, encontrarás el faro, punto donde se separan el Mediterráneo y el Atlántico, y podrás recorrer diferentes sendas para disfrutar de las espectaculares vistas. Para llegar a Cabo Espartel, situado a unos 12km de la ciudad, podrás usar taxi, autobús o coche.
Para terminar el itinerario, te recomendamos uno de los rincones secretos de la ciudad de Marruecos, las Cuevas de Hércules. Estas se encuentran cerca del Cabo Espartel y son una formación natural de rocas con vistas al mar. Aquí descubrirás una interesante historia mitológica e incluso tienes la posibilidad de vestirte con el traje regional marroquí. Es una bonita forma de terminar tu escapada de tres días a Tánger.
Si ya tienes en mente visitar Tánger, es importante que organices bien tu viaje para aprovechar al máximo tu escapada. Por lo que antes de viajar a la ciudad marroquí, te damos algunas recomendaciones que te ayudarán a tener todo bajo control.
Tánger es una ciudad multicultural situada en un cruce de caminos entre Europa y África. Su mezcla de influencias árabes, bereberes, europeas y africanas la convierte en un destino único. La ciudad te teletransportará a otro tiempo gracias a la vestimenta de la gente, la arquitectura, la comida y las tiendas tiendas de telas y diferentes objetos. Así que si quieres vivir una escapada diferente y exótica, este es tu destino. Tnto si viajas específicamente a Tánger como si te encuentras en el sur de España, vale la pena cruzar a Tánger.
Para descubrir los puntos más importantes de Tánger, dos o tres días suelen ser suficientes. En este tiempo, podrás explorar los principales enclaves de la ciudad sin problema. Sin embargo, si tienes más tiempo, siempre hay más rincones por descubrir, especialmente si quieres hacer excursiones a los alrededores o disfrutar con calma de la atmósfera de la ciudad.
El clima en Tánger es mediterráneo, por lo que los mejores meses para visitarla son de marzo a junio y de septiembre a noviembre. Durante estas épocas, las temperaturas son agradables y el calor no es sofocante. Si prefieres evitar aglomeraciones, intenta viajar fuera de la temporada alta (julio y agosto).
La moneda oficial de Marruecos es el dirham marroquí (MAD). Es recomendable llevar dinero en efectivo, especialmente en los zocos y mercados locales, donde no siempre aceptan tarjetas. Sin embargo, en las zonas más turísticas, como hoteles, restaurantes y grandes comercios, sí suelen aceptar pagos con tarjeta. Asegúrate de cambiar algo de dinero antes de salir de viaje.
El árabe es el idioma oficial en Marruecos, pero en Tánger también se habla ampliamente el francés y el español, lo que facilita la comunicación para muchos turistas. El inglés también es bastante común en áreas turísticas.
Tánger es una ciudad segura para los turistas, siempre y cuando tomes las precauciones básicas que aplicarías en cualquier destino. Evita exhibir objetos de valor en público, mantén tus pertenencias bien guardadas y ten cuidado en lugares muy concurridos, especialmente en los mercados y zocos. Ten en cuenta la cultura del regateo y la insistencia de los vendedores, la cuál es una parte cotidiana de la vida marroquí.
Algunas de las zonas que te recomendamos evitar o tener más precaución son:
Por otro lado, es recomendable viajar en taxis oficiales y si quieres ver la ciudad acompañado de alguien que la conozca, siempre es buena idea hacer un free tour en Tánger para recibir consejos de un guía local.
Algunos de los productos más típicos que puedes comprar en Tánger son alfombras marroquíes, cerámica artesanal, especias, lámparas de metal, ropa tradicional como caftanes y babuchas, así como artículos de cuero como bolsos y chaquetas. No olvides regatear, ya que es parte de la experiencia al comprar en Marruecos.
Entre los platos más populares están el cuscús, un plato tradicional hecho con sémola de trigo y acompañado de carne y verduras. También es muy común el tajine, un guiso cocinado a fuego lento en un recipiente de barro, que puede ser de pollo, cordero o verduras. No puedes dejar de probar los pasteles marroquíes como el briouat, hojaldre relleno de almendra o carne, y los dátiles y frutas secas que se venden por toda la ciudad. Para los amantes del té, el té de menta es una tradición muy apreciada.
@camilabarrosoizq 3 restaurantes de Tanger donde comimos genial. Para mi la mejor comida fue en Hamadi, pero Café à l’Anglaise y Café Terraza la Medina también nos encantaron #tanger #food #morocco ♬ Makeba – Jain
Ubicado en el corazón de la Medina, Hammadi es un restaurante que ofrece una auténtica experiencia marroquí. Decorado con un estilo tradicional, sus comensales pueden disfrutar de una variedad de platos locales como tajines y cuscús mientras escuchan música marroquí en vivo. El personal va vestido con trajes típicos te harán sentir inmerso en la cultura marroquí.
Café à l’Anglaise es un lugar encantador escondido entre las calles de la Medina. Con un menú que fusiona influencias locales con un toque europeo. Es perfecto para tomar un té de menta o disfrutar de la comida mientras te relajas en su terraza.
Situado en lo alto de la Medina, el Café Terraza la Medina ofrece unas vistas impresionantes de la ciudad y del mar. Es un lugar perfecto para relajarse mientras disfrutas de un delicioso café o un té con menta, acompañado de dulces marroquíes. Su ambiente bohemio y relajado, combinado con una ubicación privilegiada, lo convierte en un excelente lugar para recargar energías después de explorar las calles de Tánger.
Puedes encontrar varias opciones de hoteles en Tánger para alojarte, desde los típicos riads tradicionales, hasta hoteles de cinco estrellas. Los barrios más recomendados para alojarse son el centro histórico, que incluye la Kasbah y la Medina, donde estarás rodeado de la historia y cultura de la ciudad. También puedes optar por la zona de Malabata, cerca de la costa, si prefieres estar más cerca de las playas y disfrutar de un ambiente más moderno.
Riad Mokhtar, es un riad tradicional a las puertas de la Kasbah, está ubicado en Marshan, a pocos pasos del Museo de las Artes Marroquíes y a apenas 4 minutos a pie del Palacio de Dar-el-Makhzen. Podrás disfrutar de las vistas desde su azotea y su jardín. Las habitaciones son espaciosas e incluso tiene ascensor, algo que no es muy común en este tipo de alojamientos. ¡Te recomendamos probar su desayuno!
El Gran Hotel Villa de France es un hotel de cinco estrellas tiene una ubicación céntrica perfecta para todas las cosas que ver en Tánger. Aunque no es un hotel 5 estrellas como en Europa, gracias a su situación se pueden visitar caminando los puntos más emblemáticos de la ciudad sin necesidad de taxi. Un dato curioso es que en este hotel se hospedó el famoso pintor Henri Matisse.
Si buscas un hotel cerca de la estación de tren y de la playa, el hotel Hilton Garden Inn Tanger City Center es tu hotel. Equipado con habitaciones modernas y algunas con vistas a la playa. Cerca encontrarás un centro comercial y restaurantes, y el hotel dispone de desayuno buffet.
En definitiva, tienes mucho planes y lugares que ver en Tánger. Con este itinerario estamos seguros de que sacarás el máximo provecho a una ciudad llena de encanto que te transportarán a un mundo diferente gracias a la mezcla de tradiciones y modernidad. ¿Te animas a descubrir la ciudad marroquí?
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