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Los 9 puentes colgantes más vertiginosos del mundo

La mítica escena de Indiana Jones y El Templo Maldito en la que Harrison Ford corta las cuerdas del puente colgante cambió para siempre nuestra visión de estas vertiginosas estructuras voladas sobre el vacío. Pero hay algo que nos impulsa a querer seguir cruzándolas. Esa sensación de peligro y desasosiego es única, además de que estos puentes atesoran un valor paisajístico incuestionable que los convierten en atracciones turísticas fundamentales. ¡Mirad hacia abajo si podéis!

1. Kusma Gyadi, Nepal

Nepal es un destino lleno de puentes colgantes que quitan el hipo, la mayoría instalados para evitar rodeos interminables, pero tal vez el más impactante sea el que atraviesa las aguas del río Madi cerca de la ciudad de Parbat. Más de cien metros de altura lo contemplan en sus 345 metros de extremo a extremo. Solo hay que contemplar su comba para no poder evitar el lógico glups.

2. Capilano, Canadá

Tal vez el puente colgante más célebre por su altura, 70 metros sobre el río homónimo, y su longitud, 137 metros de punta a punta, pero sobre todo por su belleza ya que sobrevuela el tupido bosque de hoja perenne de este parque al norte de la ciudad de Vancouver. También por el yuyu que da sentir cómo se balancea. Pero no pasa nada, el actual está completamente restaurado y es muy seguro.

3. Dachstein, Austria

Pero para vértigo el que proporciona este puente suspendido sobre un glaciar alpino a unos 400 metros de altura. Hay que tener mucho humor para aguantar el paso por sus 81 metros de distancia de lado a lado, por muy tenso y rígido que sea el puente. Una atracción inolvidable.

4. Arenal, Costa Rica

En realidad este proyecto ecoturístico frente al Volcán Arenal consta de un total de quince puentes, algunos fijos y otros en suspensión, para adentrarse sin impacto en un bosque primario lluvioso de enorme interés medioambiental.

5. Iya Valley Vine, Japón

La gracia del conjunto de puentes que atraviesa las gargantas y los ríos de este remoto valle no estriba en su altura sino en su aparente precariedad. Durante la Guerra Genpei del siglo XII se tendieron estas pasarelas confeccionadas con maderos y con vides de glicinias entretejidas. Los puentes de hoy tienen truco, ya que aunque permanece la estética de las vides, bajo ellas se ocultan cables de acero que aseguran las estructuras.

6. Trift, Suiza

Volvemos a los Alpes para quedarnos pegados a otro puente de cables epatante como pocos. Sus números: 100 metros de altura y 170 metros de largo. El actual sustituyó al anterior Triftbrücke construido al pie de la letra de los puentes napalíes de tres cuerdas. La experiencia de volar sobre el glaciar rodeado de montañas escarpadas es apabullante.

7. Langkawi, Malasia

Pintoresco por el entorno, un manto de selva tropical y unas vistas impagables, y por la estructura en sí misma, serpenteante por el contorno de las montañas. Como puente colgante diferente, sin duda uno de los mejores.

8. Cañón Lynn, Canadá

Otra vez Vancouver como destino de puentes colgantes, esta vez en ruta del parque del Valle Lynn en donde podemos encontrar este bonito puente mucho menos masificado que el Capilano, y además gratuito. Perfecto para perderse entre la fronda.

9. Carrick -a-rede rope, Irlanda del Norte

Hay que acordarse de cuando, hace ya cuatrocientos años, había que agarrarse a una triste cuerda para atreverse a caminar por este puente hasta el islote del otro lado. Todavía hoy tiene su punto gracias a lo espectacular de su enclave entre acantilados, con las olas batiendo contra las rocas 25 metros abajo y el viento haciendo de las suyas.