Ya que la cultura bio arrasa y los últimos calores del verano aún aprietan necesitamos acudir a los mejores exprimidores frutales. Repetimos: necesitamos. Porque la boca se nos hace agua simplemente al contemplar el catálogo de olores y colores que pasan del expositor al vaso en forma de líquido más o menos espeso. Después, mucho sabor y un requisito primordial: que sea natural. Batidos y zumos, zumos y batidos sin salir de la ciudad. Nos supervitaminamos.
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A veces las franquicias nos gustan. A veces. Como esta moderna propuesta de zumos frescos elaborados al momento con tres direcciones en barrios distintos: Azca, Chueca y Malasaña. La carta es extensa, como queremos, dividida en mezclas de frutas, mezclas de frutas y verduras, y mezclas de temporada, pero a cuyo resultado puede añadirse complementos naturales como el germen de trigo, las algas espirulina y wheatgrass o el polen natural. Piensan en todo.
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Zumería fundamental desde que empezara allá por 1981 como pionera en el exprimido frutal al momento. Entre el Paseo de la Alameda y el barrio de Russafa, cerca de Gran Via del Marqués del Túria, el local despacha zumos de más de 40 combinaciones distintas, a las que añadir miel, nata o yogur, así como batidos variados y consistentes, y hasta granizados.
Territorio batido, territorio malasañero. Varios años después desde que Silvia Superstar y Edu abrieran el popular garito retro El Fabuloso, se decidieron con esta versión igual de kitsch pero enfocada a la merienda. La decoración tiki hawaiana abre el apetito para unas tortitas con nata pero también para sus batidos clásicos de fresa, vainilla y chocolate. Aunque por un poco más, mejor el Especial Coconut y, sobre todo, el Batido de 5 Dólares (plátano, helado de vainilla y nata). ¿Os suena?
4. Juicy Jones, Barcelona
Estallido de color en este restaurante vegano del Raval, cuyas frutas y verduras llevan el sello de la Boqueria. Los zumos naturales, los batidos y smoothies con leche de soja son perfectos para acompañar las especialidades veggies. Tanto rollo ecológico y exótico llama a la clientela internacional.
El no va más de la obsesión orgánica y saludable tiene lugar en estas dos tiendas (con bar de jugos y zumos) de las calles Serrano y Augusto Figueroa especializadas en el mundo de los zumos pero sujetos a los siguientes condicionantes: prensados en frío a más de dos toneladas de presión, kilo y medio de fruta y verdura en cada botella, 100% naturales y sin pulpa. Además de elegir entre su nutritivo catálogo de zumos verdes, desintoxicantes, cítricos o batidos, te asesoran para combinarlos como tratamientos détox.
6. Smart Bar, Barcelona
No lleva mucho tiempo abierto pero ya empieza a hacerse con buenas críticas y clientela fiel que aprecia el buen hacer de este sencillo y funcional bar de la zona de El Clot. Hay opción de picoteo y meriendas, pero su apuesta segura son sus zumos naturales de frutas combinadas.
7. Vacaciones Cocktail Bar, Madrid
Los hipsters se mueren por las zumerías y claro, los hipsters toman Malasaña en verano para cargar pilas en sitios tan energéticos como este local abierto a la calle Espíritu Santo. Todo es previsible pero por eso nos gusta, por su decoración informal en plan chiringuito playero y por su carta de cócteles, mojitos, desayunos y zumos/batidos refrescantes de frutas naturales. Caribeño, hawaiano, antioxidante, exótico… Y zumo de naranja natural de varios tamaños y hasta con fresas. ¡Zumo de naranja natural, siempre imbatible!
Otro veterano de la escena natural valenciana, con una historia paralela a la de Zum Zum, en este caso en pleno cogollo, a un paso de la catedral. Además de las típicas aguas alcohólicas, aquí los zumos son religión, a elegir entre un buen surtido con todo tipo de frutas a las que en algún caso se le añade leche o, ya que estamos, un chispazo de ron, vodka o whisky.
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