En Las Vegas, te gusta el mal gusto o lo llevas mal. La ciudad del pecado no se entiende sin sus excesos desbordantes ni sin ser oasis de puestas en escenas sobredimensionadas. Réplicas de monumentos famosos, luminosos cegadores, escenarios de cartón piedra, hoteles grandilocuentes y rincones imposibles si no fuera porque Las Vegas es así. Hay que entenderla y quererla. El término medio y la mesura son conceptos prohibidos. ¡Viva Las Vegas!
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1. Canales de una Venecia de mentira
3355 S Las Vegas Blvd.
¿Una Venecia en pequeñito? ¿Y con cielo artificial? Solo puede pasar en Las Vegas. Concretamente en el hotel y casino The Venetian, por supuesto un establecimiento cinco estrellas de la Strip totalmente pasado de vueltas, de números y de dólares de inversión. El magnate Sheldon Adelson fue el principal hacedor de este complejo que reproduce los principales iconos de la ciudad de los canales: el Palacio Ducal, la Plaza de San Marcos, el Puente Rialto… Y sus canales con sus góndolas y sus gondoleros, faltaría más.
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2. El castillo de Excalibur
3850 Las Vegas Blvd. South
Nada mejor para recrear el mundo de fantasía de las leyendas artúricas que un gigantesco castillo inspirado en el castillo francés de Carcasona. Almenas, torreones, puentes… Y escaleras mecánicas, y pantallas de neón, y un par de mazacotes llenos de habitaciones. Así es el Excalibur Hotel Casino.
3. Empacho de luces en la calle Fremont
425 Fremont St.
Una de las más reconocibles atracciones de la ciudad es sin duda la Fremont Street Experience, una bóveda de cañón de 460 metros de largo a 27 metros del suelo y que ocupa cinco manzanas incluyendo parte del Casino Fremont y del Glitter Gulch. Es sede del Museo de Neón y de la fiesta de Año Nuevo, así como de numerosos conciertos de música en vivo. Actualmente, la bóveda cuenta con unos 12 millones y medio de puntos LED.
4. Una Fontana de Trevi. O dos…
3570 Las Vegas Blvd. South
Estamos de acuerdo en que el Caesars Palace es un hotel disparatado. Cariátides, mármoles, un lobby bien hortera… Pero nada como hacer que Neptuno reciba al pueblo desde esa réplica de la Fontana de Trevi iluminada como si fuera una discoteca. Pero como Las Vegas es tan así, no se crean que es la única de la ciudad. Averigüen dónde está la otra Fontana…
5. El Jardín botánico del Bellagio
3600 S Las Vegas Blvd.
El hotel Bellagio que es uno de los hoteles más célebres de la Strip, no solo se alimenta de su espectáculo de fuentes sino que depara unos interiores que, si bien no son los más desfasados de Las Vegas, sí tiene espacios que se salen de la contención más razonable. El Conservatory & Botanical Gardens es uno de ellos, un lugar irreal entregado a las más inverosímiles de las decoraciones temáticas reversibles cada temporada. El Año Nuevo Chino o los homenajes a cada estación son sus principales motivos en los que no faltan floripondios ni fauna de gran tamaño.
6. La mansión de Liberace
4982 Shirley St.
Una vez cerrado su museo de Paradise, Nevada, el showman genial y extravagante que tanto hizo por engrandecer la loca historia de Las Vegas tiene en su mansión un rincón en el que recrearse entre sus oropeles, dorados, espejos y salones excesivos.
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