La paella es una de esas comidas típicas de España que levantan controversias. Los valencianos, inventores de esta maravilla gastronómica, consideran que el único arroz puro es el que ellos hacen. Los que lo intentan imitar cocinan “arroz con cosas”. Una buena paella en la Costa Brava de Cataluña es un placer, pero no hacer falta irse hasta allí para poder disfrutarla. Madrid cuenta con muchísimos restaurantes que te harán sentir en una terraza en cualquier paseo marítimo de la costa. Por ello, en el artículo de hoy te vamos a mostrar los cuatro mejores restaurantes para comer paella en Madrid.
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Está todo inventado en lo que respecta a la paella. No obstante, el chef José Antonio García ha conseguido darle un toque especial con sus fusiones. Hasta 13 tipos diferentes de arroces entre el que más destaca la paella. Realizada con conejo y garrofó, que es un haba, es una de las recetas más puras de la paella en Madrid. También puede darse el caso de que vayas con alguien al que le guste el arroz, pero no esta variedad. Otra gran opción es el del Senyoret, con carabineros ya pelados.
Si eres un aficionado al cine, el apellido de Berlanga es bastante mítico. Luis García Berlanga es uno de los mejores directores de cine que ha dado este país. Pues bien, el motivo de que este establecimiento se llame así es que está regentado por su hijo José Luis. Durante el confinamiento se reinventó para hacer servicios a domicilio y llegaron a repartir hasta 400 raciones al día. Sus opciones en cuanto a la paella en Madrid son la valenciana o la de verduras.
Norberto Jorge es un hombre de mundo. Este nativo de San Vicente de Raspeig, un pueblecito costero de Alicante, ha vivido en lugares tan recónditos como Oslo. Después se asentó en el barrio de Prosperidad para aportar sus arroces secos a la población madrileña. Lo que diferencia a este restaurante de otros es su manera de servir los platos. Una sartén artesana de armazón de cobre permite que el calor de la comida se mantenga mientras se van repartiendo las raciones. Cuenta con el nombre de “patella”, que incluso está patentado.
Más de 40 años cuentan con sus espaldas Vicente y Carmen en uno de los restaurantes de paella en Madrid más longevos. Ahora los creadores ya disfrutan de la jubilación, y son sus hijos los que regentan el local. Uno de sus platos estrella es la paella valenciana, la cual hay que pedir con antelación. Lo bueno que tiene es que te sirven el arroz en la paellera todavía caliente con una capa fina. La cocción se mantiene en su punto y no llega a pegarse a la superficie.
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Comer una buena paella en Madrid es más sencillo de lo que parece. Obviamente no es lo mismo que tomarla en una terraza con vistas al mar. Pero al final tampoco vas a estar cogiendo un AVE a Valencia cada vez que quieras darte un homenaje de arroz el fin de semana.
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