Los 10 Spas más relajantes de España

El verano ha podido ser frenético y por eso necesitamos tomarnos un respiro. Para encontrar ese ansiado paréntesis que nos haga encontrar el equilibrio entre cuerpo y mente os seleccionamos los mejores santuarios wellness. Tratamientos exclusivos, chorros revitalizantes, envolturas rejuvenecedoras, piscinas dignas de emperadores romanos… La salud y la belleza quedan a buen recaudo en estas instalaciones balnearias, casi todas asociadas a hoteles lujosos. Porque estos son spas de verdad en España.

1. Gran Hotel Bahía del Duque, Tenerife

Imposible no empezar por una de las referencias del bienestar español, alojada en un hotel de bandera. El spa está rodeado de piedra volcánica y antes de entrar presenta una piscina exterior de talasoterapia de 35 metros y un solárium con hamman, sauna y un par de duchas. Sólo agua del Atlántico. Dentro, 20 cabinas de tratamientos con productos Natura Bissé y fisioterapia Michal Novotny. Entre los programas, la purificante Experiencia Diamond en dos jornadas, aunque son los rituales orientales de la Thai Room, inspirados en el yoga, el ayurveda, el masaje tailandés o la tradición Jamu de Indonesia los más destacados.

2. Balneario Sicilia, Jaraba

Aquí el agua –beberla o zambullirse en ella- es una obligación por sus propiedades diuréticas. La experiencia de más de 150 años avalan al balneario que fundara Manuel Sicilia tras (re)descubrirse el manantial de aguas termales ya utilizadas por los romanos. Pionero del termalismo desde la década de los setenta, el balneario sigue respondiendo a las exigencias de la hidroterapia con un completo catálogo de programas y tratamientos. Además de la cámara de sal y del baño japonés en el jardín termal, no hay que perderse la piscina cubierta dentro de una cueva real y con salida a cielo abierto. Única en su especie.

3. Castilla Termal Burgo de Osma, Burgo de Osma

Uno de las instalaciones wellness del grupo Castilla Termal Hoteles tiene también un emplazamiento privilegiado dentro de la antigua Universidad de Santa Catalina, del siglo XVI, convertida en hostería. Bajo el claustro renacentista y la cúpula que lo preside, 1.500 metros de zona termal, con piscinas, circuito de contrastes y tratamientos. En realidad, una ermita mozárabe del siglo XI es el impresionante escenario de estos baños. Una joya.

4. Balneario Real y Aquaxana en Las Caldas Villa Termal, Oviedo

Desde 1776, el Real Balneario de Las Caldas es una eminencia termal que conserva todavía toda su esencia asturiana de época, rejuvenecida en nuestros días por el efecto curativo de sus aguas de manantial mineromedicinales que desbordan espacios tan relevantes como la piscina de contrastes, bautizada como El Manantial, o la Sala de Columnas, con su piscina de flotación. Además, cosmética ecológica, un centro de ocio y relax, y un instituto asesor.

5. Bliss Spa Barcelona en W Hotel, Barcelona

La vanguardia hecha spa. La sección Wellness del Hotel W, el hotel vela de la Ciudad Condal, es más que unas piscinas y un poco de vapor de agua. Aquí suena R&B, se degustan brownies y se blinda el estrés con tratamientos exclusivos, como la oxigenoterapia, ambiente balsámico y vistas de infarto al Mediterráneo. Bueno, de infarto… Como que no. De pura vida, más bien.

6. Thai Spa en Asia Gardens Hotel, Alicante

Tan sugerente y evocador como puede imaginarse, un trocito de esencia asiática en un envoltorio de jardines edénicos, sin dejar el Mediterráneo. El masaje tradicional tailandés es el principal producto de todo el programa de bienestar lleno de exquisiteces sensoriales, y es que los profesionales que lo dan han sido instruidos en esta técnica ancestral en el mismísimo templo Wat Po de Bangkok. Qué mejor garantía.

7. SHA Wellness Clinic, Playa del Albir

Para templos revitalizantes este hotel y clínica, clínica y hotel, que hace las delicias del famoseo y de todo aquel que necesite una puesta a punto, y a fondo.  Encaramado en la montaña, en el Parque Natural de Sierra Helada, mira a la bahía de Altea como si estuviéramos en el Tíbet. No faltan las técnicas orientales milenarias, desde el shiatsu hasta el Ai Chi japonés o el masaje podal hindú Padabhyanga. La zona de piscinas exteriores, minimalista a rabiar, cura en sí misma.

8. Castilla Termal Balneario de Solares, Solares

Otro gran ejemplo del renacer de la antigua tradición balnearia del norte de España, en este caso gestionada de nuevo por el grupo Castilla Termal Hoteles allí donde este complejo termal tuvo su esplendor a finales del siglo XIX y principios del XX, aunque sus aguas de manantial ya brotaban mucho antes. Hoy, un distinguido edificio rodeado de un parque centenario alberga unas modernas instalaciones en las que se imparten fangoterapia o algoterapia, o en donde uno puede pasarse la vida en remojo sin salir de la piscina termal equipada con todo tipo de chorros, cascadas y hasta con una ría para nadar a contracorriente.

9. Villa Padierna Thermas Hotel, Carratraca

Las fechas aquí se pierden más en el tiempo ya que en época de dominación romana las legiones aliviaban sus males guerreros en este manantial, y sobre cuyas termas hoy se rinde culto a sus aguas sulfurosas, cálcicas y magnésicas, tal y como se hacía entonces. La ambientación, al menos, recrea aquel mundo que no conoció hotel tal lujoso como este, todo hay que decirlo.

10. Spa Molton Brown en Alva Park Costa Brava, Lloret de Mar

Un escenario de suntuosidad, un rincón de fantasía para descansar de los rigores rutinarios y dejarse transportar a El Baño de la Princesa Hindú, de agua salada y caliente con música subacuática, o dejarse hacer con masaje tibetano y ayurvédico, o mimarse en el único spa en Europa continental de la firma cosmética londinense más prestigiosa. Molton Brown, ahí es nada.