¿Sabes que hay un listado de las ciudades más maravillosas del mundo? Primero lanzó la elección de las siete nuevas Maravillas de la Tierra, sucesoras de mitos como el Coloso de Rodas o los Jardines Colgantes de Babilonia, y acertó: más de 90 millones de personas participaron con su voto en el proyecto New 7 Wonders del millonario suizo Bernard Weber en el año 2000. El resultado, un top 7 viajero de primer orden: la antigua ciudad de Petra (Jordania), la Gran Muralla (China), el Cristo Redentor de Río de Janeiro, el santuario de Machu Picchu (Perú), las pirámides de Chichen Itzá (México), el Taj Mahal (India) y el Coliseo romano.
Publicidad
Repitió la fórmula (y éxito de convocatoria) ocho años después con las siete nuevas Maravillas de la Naturaleza. Nuevo hit de participación y otro espectacular catálogo de destinos dignos de ser visitados una vez en la vida: Halong Bay (Vietnam), Iguazú (Argentina y Brasil), el Amazonas (Sudamérica), las islas de Komodo (Indonesia), Table Mountain (Sudáfrica) y el parque nacional del río subterráneo Puerto Princesa (Filipinas).
En 2012 Weber culminó la troligía proponiendo designar las siete ciudades más maravillosas del mundo entero entre unas 1.200 candidatas iniciales. Y, como siempre ocurre en estos casos, no están todas las que son (maravillosas, evidentemente), pero, probablemente, sí sean (maravillosas) todas las que están. ¿Qué cuáles son? Vean, vean…
Semiderruida y sofisticada a un tiempo, basta un atardecer desde la Corniche para comprender por qué la capital de Líbano figura entre las elegidas. Y si no, prueben a tomar un café en Hamra y ya no tendrán ninguna duda.
La capital cubana comparte, en cierta medida, el secreto: llegar a contemplar cómo se va el día desde el Malecón ya justifique el billete. Y después, además, queda la noche habanera…
La vida a 3.500 metros de altura entre nevados andinos. La Paz es una ciudad enriscada, casi vertical, en la que hay que perderse en sus calles y también venirse arriba, es decir, subir hasta alguno de sus miradores para ver dónde está ubicada y la belleza que la rodea.
Publicidad
Triunfa menos que Ciudad del Cabo o Johanesburgo entre los viajeros extranjeros, pero el clima suave y sus playas surferas la convierten en uno de los grandes destinos del turismo interior sudafricano.
Establecida en el siglo XVI en la costa oeste de la isla de Luzón, fue declarada patrimonio mundial por la Unesco hace más de 15 años y es una de las ciudades más maravillosas del mundo por una sencilla razón: es la ciudad colonial española mejor conservada en toda Asia, cuya arquitectura ha fusionado la tradición asiática con la construcción europea y es un caso único en todo el continente.
Su skyline ha hecho que la ciudad de Malasia, Kuala Lumpur, esté entre las ciudades más maravillosas del mundo. Y es que su es paisaje es inconfundible gracias a las torres Pretonas, dos espigadas agujas de 452 metros unidas por una pasarela que se eleva del suelo unos 170 metros de altura. Se puede subir y contemplar la ciudad desde ella (menos los lunes).
Como ocurre en Dubái, la pujanza económica de Doha –Qatar cuenta con la tercera mayor reserva de gas del mundo– deriva en propuestas turísticas entre lo futurista y lo excéntrico, como la llamada Perla de Qatar, una isla artificial al servicio del capital extranjero que abarca cuatro millones de metros cuadrados y se interna 350 metros en el mar.
ÚNETE AHORA
Regístrate y recibe nuestra newsletter
ÚNETE AHORA ÚNETE AHORALa función MIS FAVORITOS sólo está disponible para usuarios registrados. Accede a tu usuario o crea tu cuenta gratuita.
acceder área privada
0 Comentarios