¿Qué haríamos sin esas historias que enriquecen realidades de por sí demasiado prosaicas? La vida no tendría eso, vidilla. Las leyendas alimentan el espíritu, lo llenan con relatos paralelos que en la mayoría de los casos no merecen ni ser contrastados porque es mejor inferir un acuerdo implícito de cuentos que contarse de generación en generación. La Laguna Negra, sí, esa misma laguna negra de los Picos de Urbión que en realidad tiene mucho de negra por el color de sus aguas, tiene su propia leyenda. A decir verdad, la leyenda de la Laguna Negra no es una, sino unas cuantas.
Publicidad
Por encima de todas está la leyenda machadiana, la que don Antonio Machado fundó durante su periplo soriano. Quiso primero imprimirla en prosa para después hacerlo en romance y terminar de inmortalizarla en versos de Campos de Castilla, obra inmortal del poeta sevillano.
Fue a raíz de una excursión suya al Pico de Urbión, cuando conoció por vez primera el paraje de marras, mucho antes de que fuera declarado Parque natural de la Laguna Negra y los Circos Glaciares de Urbión. Allí situó el pasaje de La tierra de Alvargonzález, tal vez inspirado en algún episodio real de la crónica negra de la época. Se trata del parricidio del tal Alvargonález a manos de dos de sus tres hijos con el fin de cobrar herencia antes de tiempo. Arrojado el cuerpo a las aguas de la laguna y toda vez que paga por el crimen un pobre paria, las tierras cobradas quedan yermas hasta que el tercero en cuestión regresa, se hace con ellas y las insufla vida de nuevo, siendo objeto del mismo fatal desenlace a manos de sus hermanos reincidentes. Acosados por su destino, huyen a la laguna, en cuyas aguas de profundidad infinita acaban pereciendo sin remisión.
Y es que, según los versos de Machado, la Laguna Negra no tiene fondo, hipérbole coincidente con la de otros relatos anteriores que, además se atrevían a aventurar una imposible comunicación subterránea con el mar, o que en sus profundidades se oculta una criatura que engulle a modo de monstruo marino todo infeliz que se sumerja en ellas. El caso es que la Laguna Negra no debe superar los diez o doce metros de profundidad. Pero, ¿a quién le importa?
Regístrate y recibe nuestra newsletter
ÚNETE AHORA ÚNETE AHORALa función MIS FAVORITOS sólo está disponible para usuarios registrados. Accede a tu usuario o crea tu cuenta gratuita.
acceder área privada
5 Comentarios
Comentario de Maria Teresa Saenz
Publicado el 30 de marzo de 2019
En Indonesia , creo que és la Isla de Flores, donde tambien hay una laguna negra, otra blanca i otra azul. En la blanca tiraban a los bebes que morían, a la azul a los que morían de jóvenes y a la negra a los que morían de mayores. Así nos lo explicaron en una visita a los mencionados lagos.
Comentario de Yolanda
Publicado el 31 de marzo de 2019
Os animo a visitar la laguna
Comentario de Luis Javier de El Viajero Fisgón
Publicado el 3 de abril de 2019
¡Gracias Yolanda! Un saludo
Comentario de Luis Javier de El Viajero Fisgón
Publicado el 9 de abril de 2019
Gracias por compartirlo Maria Teresa. Un saludo
Comentario de susan
Publicado el 13 de septiembre de 2022
La laguna Negra es precioso---monstruo y todo......