¿Es ético hacerse fotos junto al monumento del Holocausto en Berlín?

Entre los muchos lugares de interés que ver en Berlín está el Monumento del Holocausto que, desde 2005, recuerda a las víctimas judías del holocausto nazi. El monumento, diseñado por el arquitecto Peter Eisenman, está formado por 2.711 losas de diferentes alturas y cuenta con un centro de información sobre el horror sufrido por las víctimas del exterminio nazi.

La naturaleza y el significado del Monumento del Holocausto hacen que este lugar de Berlín no sea un punto turístico más, sino un lugar especial que invita a la reflexión y al recuerdo de las víctimas. Por eso hay mucha gente que considera una falta de respeto hacerse selfies en el Monumento del Holocausto a modo de postureo o con poses supuestamente divertidas. Priyanka Chopra, una de las protagonistas de la película “Los vigilantes de la playa” y una de las actrices de televisión (“Quantico”) mejor pagadas del mundo, fue criticada este verano en las redes sociales por subir a su perfil de Instagram dos selfies en el Monumento del Holocausto incluso aunque su pose ante la cámara del móvil fuera normal. La actriz eliminó después esas fotografías.

En contraposición, hay quien defiende que no se trata de un cementerio ni de un lugar sagrado y que no está prohibido hacerse fotos en ese lugar, algo que por otra parte es cierto. Cada uno tendrá su propia opinión al respecto, pero parece claro que una cosa es hacer fotografías del Monumento del Holocausto y otra muy distinta es hacerse selfies como postureo para subirlas al perfil de Instagram o a otras redes sociales como Facebook en un lugar que recuerda a las personas que sufrieron las atrocidades cometidas por los nazis.

Unos meses antes, a principios de 2017, la polémica en relación a hacerse fotografías en el Monumento del Holocausto de Berlín llegó cuando el escritor israelí Shahak Shapira tomó -sin permiso- 12 selfies de diferentes usuarios de las redes sociales en el Monumento del Holocausto para realizar un montaje fotográfico y colocarlas sobre duras imágenes de los campos de concentración con cadáveres amontonados. Mientras que hubo gente en las redes sociales y en los medios de comunicación que aplaudió esta iniciativa, llamada Yolocaust -combinación de “yolo” (you only live once, es decir, sólo se vive una vez) y “holocaust”-, otros lo consideraron excesivo.

Shapira, que retiró de su página web las fotografías de los usuarios que se lo pidieron, explicó que su intención con Yolocaust no era decir a la gente lo que tiene que hacer y lo que no, sino invitar a la reflexión. Y eso sí que es algo que todos debemos hacer cuando visitamos lugares como el Monumento del Holocausto o los campos de concentración de Auschwitz.
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