El Hermitage de San Petersburgo

Destino imprescindible para los amantes del arte y la cultura, el Museo del Hermitage, una de las pinacotecas más importantes del mundo, se alza orgulloso a orillas del río Neva en la capital de los antiguos zares rusos, San Petersburgo. El Greco, Velázquez, Matisse o Picasso dentro de uno de los edificios más majestuosos del mundo. ¿Viajamos?

Más de tres millones de obras de arte entre pinturas, esculturas, mobiliario, hallazgos arqueológicos o material numismático es lo que podemos encontrar en este impresionante recorrido por la historia rusa y europea que propone uno de los mejores y más célebres museos del mundo: el Hermitage de San Petersburgo. El museo atesora piezas desde la prehistoria hasta el siglo XX, pero fue gracias a la emperatriz Catalina II, conocida como Catalina la Grande, que gobernó Rusia durante entre 1767 y 1769, que hoy podemos disfrutar de un paseo por la historia del arte europeo de todos los tiempos, ya que ella fue la encargada de atesorar la mayor colección privada de arte de toda Europa. Adquirió para ello colecciones privadas de nobles y políticos europeos que contaban con grandes obras de los grandes maestros de todos los tiempos, y que fueron posteriormente ampliadas por los zares Alejandro I y Nicolás, II que fue quien lo convirtió finalmente en Museo Imperial.

El Hermitage ocupa en la actualidad cinco edificios unidos: el Palacio de Invierno, el Teatro de Hermitage, el Hermitage Pequeño, el Hermitage Viejo y el Nuevo Hermitage. El Palacio de Invierno, cuya construcción reflejó a la perfección la grandeza y el poder de la Rusia Imperial, fue la residencia oficial de los zares hasta 1917 tras la caída de la monarquía, y cuyo ataque se convirtió en un icono de la revolución rusa. Majestuoso y enorme, el palacio cuenta con una fachada principal de 150 metros de longitud y 30 de altura, y alberga en su interior 1.786 puertas, 1.945 ventanas y 1.500 habitaciones, todo ello conectado a través de 117 escaleras.

Construido en 1785 en el emplazamiento del antiguo Palacio de Invierno de Pedro el Grande, el teatro del Hermitage está considerado uno de los más antiguos de San Petersburgo y de Rusia. El auditorio del teatro se asemeja a los de la Antigüedad en forma de anfiteatro, además de estar ricamente decorado con esculturas y columnas de mármol al estilo clásico. Después de varios usos, hoy en día se puede seguir disfrutando de representaciones en el mismo escenario que Catalina la Grande eligió para entretener a la familia imperial rusa y sus diplomáticos.

Dentro del complejo arquitectónico, el edificio que sirve como vínculo entre el barroco Palacio de Invierno y el clasicismo del Gran Hermitage y el Nuevo Hermitage es el conocido como Pequeño Hermitage, que fue construido por orden de Catalina II en 1765 como residencia privada y de descanso, y al que sólo podían acceder invitados personales de la emperatriz. Tal era la búsqueda de privacidad que la mesa del comedor, con vistas a un jardín colgante y que hoy ya no existe, descendía a la planta baja con ayuda de un mecanismo especial,  para que los sirvientes no importunaran a la emperatriz y sus invitados.

La entrada principal del museo, un espléndido pórtico con figuras de atlantes grabadas en granito, se encuentra en el edificio del Nuevo Hermitage, y fue el primer edificio construido en Rusia para albergar específicamente arte por el arquitecto alemán Leo Von Klenze entre 1842 y 1851. Al igual que el Gran Hermitage, que contenía la biblioteca imperial y estaba destinado a albergar colecciones de arte del palacio, fue ampliado con una nueva ala para albergar las logias de Raphael, una réplica de la famosa galería en el palacio papal en El Vaticano.

¡Buen viaje!

Datos prácticos: El museo está en Dvortsovaya (plaza) Ploshchad nº 2. Está abierto martes, jueves, viernes, sábado y domingo de 10h30 a 18h, y los miércoles de 10h30 a 21h. La entrada sencilla cuesta 17’95$ y puedes adquirirla online en http://www.hermitageshop.org/page.php?pagename=tickets
ÚNETE AHORA