7 casas rurales con chimenea para pasar un finde calentito

Con la ola última de frío se va el recuerdo del verano, y al mismo tiempo llegan los placeres del invierno. No hay nada mejor, cuando las temperaturas bajan hasta niveles cercano al cero, que recogerse en una casa rural con una taza de chocolate caliente delante de una chimenea. Estas son las casas rurales para pasar el invierno de una forma más placentera.

1. Los Acebos de Peña Cabarga (Cantabria)

Está en el pueblo de Sobremazas, perteneciente al municipio de Medio Cudeyo, a unos 14 km. de Santander y a tan solo 6 km. del Parque de la Naturaleza de Cabárceno. Aquí podrás disfrutar junto a tu familia podrán del mejor turismo rural de Cantabria.  En esta reserva hay varias especies en peligro de extinción como tigres, osos, leones, jaguares, elefantes, rinocerontes, jirafas y búfalos. La casa rural Los Acebos de Peña Cabarga es un remanso de paz dividido en tres apartamentos totalmente equipados, con huerta, jardín, terraza y por supuesto chimenea.

Los Acebos de Peña Cabarga (www.casaruralcabarceno.com)

2. La Casona del Guijar (Segovia)

Otra de las casas rurales para que el invierno se te haga más corto está en El Guijar, en la provincia de Segovia. La chimenea de esta casona está rodeada de piedra y sofás de flores. Este alojamiento tiene capacidad para 23 personas gracias a la remodelación de tres antiguas casas de labranza. Posee tres patios, uno de ellos con piscina, porche para barbacoa y un entorno natural inmejorable, que está cerca del valle del Pirón y de las Hoces del Duratón.

La Casona del Guijar (www.lacasonadelguijar.com)

3. Casa Rural El Robledillo (Ávila)

Entre las casas rurales para pasar los días más fríos del invierno hay que citar esta de El Robledillo. Es un destino con encanto en el que podrás encontrar tranquilidad y sosiego. El pueblo es pequeño, muy arbolado y con vistas a antiguos corrales abandonados. Te encantará el estilo rústico y acogedor de la casa, con las típicas puertas de madera, techos de vigas y una decoración discreta. En su amplio salón hay una chimenea de leña ideal para los meses más fríos. La terraza de la casa cuenta con una barbacoa donde podrás preparar estupendas chuletadas para tu familia y amigos.

Casa Rural El Robledillo (iStock)

4. Can Fainé (Barcelona)

Es un conjunto formado por una masía y dos alojamientos rurales independientes con huerta y piscina, situado a 1,5 km. de la estación de tren Sant Vicenç de Castellet. Además, está a tan solo 10 km. de las montañas de Montserrat, a 6 km. de Manresa y a 10 km. de Món Sant Benet. Forma parte del parque natural del Munt i l’Obac. En el exterior, Can Fainé tiene una terraza y una barbacoa dónde se pueden cocinar parrilladas de carne y verdura. Por supuesto hay chimenea.

Can Fainé (www.canfaine.com)

5. Salt del Colom (Barcelona)

Está en L’Espunyola, cerca de Barcelona, y es mucho más que un alojamiento de turismo rural. Tras la reforma, hecha con materiales sostenibles como pinturas transpirables, Salt del Colom está organizada de forma ecológica. La calefacción es de biomasa, se aprovechan las aguas pluviales y todas las maderas son naturales. Hay una zona de relax con sauna y jacuzzi y una bonita chimenea. La casa está dividida en dos partes, de manera que se puede alquilar entera o por separado.

Salt del Colom (www.saltdelcolom.com)

6. Mas de la Serra (Teruel)

Esta antigua masía está en Fuentespalda, en la comarca del Matarraña (Teruel). Es un hotel ‘boutique’ donde lo más antiguo y tradicional se combina con elementos modernos y comodidades para que tu estancia se lo más satisfactoria posible. Hay dos chimeneas: una rústica y abierta, en la sala de estar de la planta baja, y una estufa de forja negra en la planta superior, con bonitas vistas al parque natural dels Ports. Es una de las casas rurales perfectas para pasar el invierno.

Mas de la Serra (www.masdelaserra.com)

7. Cortijo del Zoco Bajo (Córdoba)

Ubicada en Pozoblanco, cerca de Córdoba, este cortijo se divide en dos plantas con cinco dormitorios y tres cuartos de baño. Tiene una capacidad para 16 personas. Hay calefacción de suelo radiante en todas las habitaciones y una bonita chimenea en el salón. También cuenta con piscina de agua salada y barbacoa. En este «agroturismo» se practica el reciclaje, la reutilización de las aguas y el compostaje. La sostenibilidad es el lema de esta casa rural, perfecta para los días de invierno.

Cortijo del Zoco Bajo (iStock)