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5 pueblos con encanto en Cuba

Baracoa

“Cuba” y “encanto” son dos palabras que están estrechamente unidas. Y no sólo por el atractivo de sus playas ni de ciudades como La Habana o Santiago de Cuba, sino también por un rico conjunto de pueblos de Cuba que merece la pena visitar. No es fácil elegir entre tantos lugares, por pequeños que sean, llenos de encanto como atesora Cuba, así que lo que viene ahora no es sino una pequeña, por número, selección:

1. Baracoa

Baracoa, conocida como la Ciudad Primada, fue la primera villa de Cuba fundada, en 1511, por el conquistador español Diego Velázquez. Hernán Cortés fue el primer alcalde de Baracoa, lugar de nacimiento del boxeador Pepe Legrá, nacionalizado español y dos veces campeón del mundo de peso pluma. Baracoa, que en la lengua indígena significa “existencia de mar” es en la actualidad un atractivo destino turístico de Cuba.

Baracoa (iStock)

2. Viñales

A unos 180 kilómetros de La Habana se encuentra Viñales, una pequeña localidad de la provincia de Pinar del Río que despunta por el paisaje natural del Valle de Viñales, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, que la rodea. Allí, además de una rica vegetación, se puede contemplar el Mural de la Prehistoria, pintado sobre una formación rocosa, que representa la evolución natural de la vida. Muchas de las casas de Viñales, al igual que en otros pueblos de Cuba, ofrecen la posibilidad de alojamiento a los turistas que lo visitan.

Mural de la Prehistoria en el Valle de Viñales (iStock)

3. Trinidad

La UNESCO declaró en 1988 Patrimonio de la Humanidad el centro histórico de Trinidad, una de las primeras villas de Cuba fundadas por los españoles. Hoy día, Trinidad sigue siendo uno de los lugares coloniales mejor conservados de América. Entre sus muchos puntos de interés destacan el Museo de Historia, el Museo de Arqueología Guamuhaya, el Museo de Arquitectura Colonial, la Casa de la Trova, las antiguas fábricas de azúcar y el Museo Romántico que se encuentra en su Plaza Mayor.

Trinidad (iStock)

4. Gibara

Se cree que Cristóbal Colón avistó tierra cubana en la montaña ahora conocida como Silla de Gibara el 27 de octubre de 1492. Un día después llegó a la Bahía de Baray y al siguente día, el 29 de octubre, sus naves alcanzaron la Bahía de Gibara, a la que Colón bautizó como Río de Mares. Gibara, que quedó entonces bajo la jurisdicción de la villa de Bayamo, no sería fundada como tal hasta 1817. Sus plazas, edificios de corte neoclásico, museos, playas y cuevas, además de las fortalezas del Cuartelón y la Batería de Fernando VII, convierten a Gibara en uno de los lugares de Cuba con más encanto.

Iglesia de San Fulgencio en Gibara (iStock)

5. Cienfuegos

No es que sea un pueblo pero, Cienfuegos , conocida como la Perla del Sur, es una ciudad que vale la pena visitar y que, como sucede con otros lugares con encanto de Cuba, muchas veces no tiene el reconocimiento que merece. La UNESCO, en cambio, sí que reconoció el centro histórico de Cienfuegos como Patrimonio Cultural de la Humanidad en 2005. Además del encanto de sus calles, concebidas en forma de cuadrículas, destacan monumentos y lugares de interés como el Jardín Botánico de Cienfuegos, la Fortaleza de Nuestra Señora de los Ángeles de Jagua, el cementerio de Reina, el Palacio de Valle que vemos en la imagen o el Parque José Martí alrededor del cual se aglutinan el ayuntamiento, la iglesia y el teatro Terry.