Coger olas no es solo cosa del verano. Este deporte, cada vez más interiorizado en nuestra sociedad como referente lifestyle, también se practica en invierno. Por eso, damos cinco claves hoteleras para dormir bien tras una extenuante jornada sobre la tabla. Porque sí, amigos, hay hoteles de surf.
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1. H.A.N.D. surfhostel (Langre, Cantabria)
Para empezar, España. Y en una de nuestras cunas surferas: Laredo, Ajo, Langre… Surf cántabro en estado puro. Por un lado, escuela con cursos muy flexibles y posibilidad de alquilar neopreno y tabla. Por otro, un bar animado para un desayuno previsor o un poco de cañeo a la hora del aperitivo. Y, claro, habitaciones. Eso sí, muy sencillas, algunas de ellas compartidas con literas. No se necesita más. ¡Diversión asegurada!
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2. Moana Surf Hostel (Urdúliz, País Vasco)
Seguimos en las olas del Cantábrico, ahora en las de las playas vizcaínas de Sopelana y Barrika. Este divertido hostel, bien puesto y a imagen y semejanza de los caseríos vascos pero con originales detalles temáticos, no esconde su vocación surf pero tampoco su afición por el skate. Organiza completos campamentos veraniegos para ambas disciplinas, y antes en Semana Santa, pero el resto del año acoge a fanáticos que no entienden de frío. Un lujo para la chavalada surfera.
3. Memmo Baleeira (Sagres, Portugal)
Si un hotel lo monta un surfero, el hotel no defraudará a los aficionados. En el caso de Rodrigo Machaz y sus hoteles de diseño, en el barrio lisboeta de Alfama y éste a pie de puerto y frente a las islas de Martinhal, no defrauda ni a los huéspedes más exigentes. Arquitectura balsámica integrada en el entorno, espacios minimalistas y muy luminosos, y habitaciones de categoría con vistas directas al océano. Cursos de surf, windsurf y buceo –equipo de la federación portuguesa liderado por João Mealha, en el puesto 16 del ranking surfero luso-, más alquiler y guías para progresar en las salvajes playas del Algarve.
4. The Harmony Hotel (Nosara, Costa Rica)
El amor por el surf unió a los propietarios de este hotelito sostenible, pareja desde que se encontraron surcando las olas de Playa Guoines, una de las más consistentes todo el año del mapa surfero internacional. No en vano, National Geographic considera a Nosara una de las 20 ciudades fundamentales para practicar surf, ya sea en modo principiante o experto. Además, encanto autóctono en sus bungalós selváticos.
5. Quicksilver Palm (Palm Springs, Estados Unidos)
Una rareza a tener en cuenta es la creación de la cadena Quicksilver Hotels & Resorts International, independiente de la famosa marca aunque con licencia para explotarla en hoteles temáticos dedicados al surf. Por ahora, y a la espera de hacerse realidad en Hawai, Bali o Costa Rica, el primero de ellos en abrir será este resort (¡en pleno desierto californiano!) que ya acepta sus primeras reservas. Tendrá piscinas de olas, indoor skydiving con túnel de viento, pistas de skate, y cuenta con el asesoramiento del surfista más famoso de la historia: Kelly Slater.
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