Los bellos atardeceres, formaciones volcánicas únicas en el mundo, reservas naturales con especies en extinción, maravillosas playas… y así hasta completar un abultado catálogo de rincones únicos que ver en las Islas Canarias. Entre todos ellos, te proponemos diez de ellos que a nosotros nos gustan especialmente. ¡Disfrútalos!
Publicidad
Cada zona del planeta presume de tener uno de los mejores atardeceres del mundo; en las Islas Canarias esta ubicación se encuentra en el Monumento Natural de Roque Nublo en Gran Canaria. Su elevación a casi 2.000 metros sobre el nivel del mar te permitirá tener una vistas de un horizonte conformado por un manto de nubes que se tornan anaranjadas al caer el sol. Antes de agotar tu carrete sacando fotos, aprovecha para darte una vuelta por el impresionante Parque Rural del Nublo.
Sin salir de la isla (Gran Canaria) te recomendamos que no dejes pasar la oportunidad de hacerte la pequeña distancia que te separa de la Playa de la Garita –próximo a Telde-, donde podrás presenciar uno de esos fenómenos naturales únicos como son los bufones. Son oquedades submarinas que conforman figuras prismáticas de basalto cuya conexión con el mar les hace contener el agua a gran fuerza. Un espectáculo natural único con la banda sonora de fondo del particular ruido que provocan. Lo tienes que ver en las Islas Canarias.
Tiene 800.000 años de antigüedad y está considera uno de los orígenes de la isla o al menos, la mayor antigüedad existente. Aprovecha la inigualable ocasión para presenciar de cerca las rocas plutónicas existentes en su superficie, dado que apenas existen más ejemplares en el resto del planeta. No es el único rasgo diferencial, también cuentan con una variante de araña –Majoreus Randoi- que se encuentra en peligro de extinción.
Los más viejos del lugar quizá los sigan recordando como la ‘Muralla del Infierno’ lo que ya puede darte una idea de lo que te vas a encontrar. Además, cuentan que sus abruptos barrancos fueron utilizados por los piratas como guaridas. La mejor forma de recorrerlos es tomar la ruta de senderismo por el barranco de Masca (5 kilómetros aproximadamente) alcanzando los 750 metros de altura. Tranquilo, que el esfuerzo tiene recompensa, la playa te espera al final del camino.
Publicidad
Lanzarote es una isla volcánica por excelencia cuya visita es parada obligada para los amantes de estas formaciones geológicas. La Cueva de los Verdes te permitirá recorrer un túnel natural en el interior de la tierra –formado por el Volcán Corona-. Los túneles de lava que se encuentran en esta zona están considerados los más largos del mundo prolongándose su extensión desde el cráter hasta el mar. Sin duda alguna, uno de los rincones que ver en las Islas Canarias.
Este entorno natural de casi 4.000 hectáreas de extensión (un 10% de la superficie total de la isla), es Patrimomino de la Humanidad desde 1981. Si dispones de poco tiempo para visitarlo te recomendamos que te dirijas al Caserío de La Palmita donde podrás ser testigo de la amplia muestra de vegetación con su principal estandarte a la cabeza, los árboles de Laurisilva. Después, puedes recorrer el camino que une Las Mimbreras con el Bosque del Cedro atravesando la hermosa ermita de Nuestra Señora de Lourdes. No obstante, te recomendamos que reserves un par de días de tu viaje para conocer con profundidad este paraje único.
Si no tienes oportunidad de presenciar la belleza paisajística que conforman los árboles de laurisilva que te proponíamos en la Gomera, te ofrecemos una alternativa: el norte de la isla de La Palma, en el entorno del nacimiento de los ríos de agua natural Marcos y Cordero. Te recomendamos que lleves contigo calzado cómodo para recorrer la senda que separa la Casa de la Montaña de la Reserva de la Biosfera Los Tilos atravesando el Parque Natural de Las Nieves. Otro consejo, porta una linterna dado que durante el camino atravesarás diferentes túneles sin ningún tipo de iluminación.
La volcánica El Hierro también ofrece estampas increíbles como son las piscinas naturales de agua marina de Charco los Sargos, situadas en La Frontera, entre las piscinas de La Maceta y Charco Azul. Esta pequeña cala es de origen volcánico por lo que no esperes posar tu toalla sobre una extensión de arena aunque su agua cristalina y la poca afluencia de turistas bien merece una visita. Al menos, estamos seguros que, dado el entorno, será irrepetible.
Ubicada al norte de la isla, su Basílica de la Virgen de Pino, es el principal atractivo y lugar de peregrinaje de los habitantes del archipiélago. Su aspecto actual es fruto de varias restauraciones, la última de las cuales tuvo lugar finalizó en 1969. No obstante, no es el único atractivo de esta pequeña localidad, date una vuelta por su casco histórico y la Plaza de Teror desde donde podrás contemplar los balcones típicos de la arquitectura canaria.
Probablemente habrás oído de este volcán -1.560 metros de altura- porque, aunque hace ya más de 100 años, fue el último en entrar en erupción en la isla (1909). Desde entonces, los árboles y un inmenso bosque se han ido abriendo paso entre el paisaje negro. Posteriormente, ha sido declarado, junto a su entorno, de nivel de protección especial, convirtiéndose en Reserva Natural Especial. La flora y fauna predominante está compuesta por pinos y escarabajos.
Las Islas Canarias ofrecen una riqueza natural y cultural inigualable, con paisajes volcánicos únicos, reservas naturales excepcionales y pueblos llenos de historia. Cada rincón que ver en las Islas Canarias es una invitación a descubrir lo extraordinario de unas islas que siempre atrapan.
ÚNETE AHORA
La Navidad es ese momento del año donde hay que estrujarse el cerebro. Hay mucha…
El 5 de diciembre, un avión de Air China pasó por un aterrizaje tenso en…
La capital española es una de las ciudades que más sale a relucir durante las…
Una joven turista china experimentó un incidente alarmante en Sri Lanka al caer de un…
A pocos kilómetros de El Escorial, en la Comunidad de Madrid, se encuentran algunos de…
Unas jóvenes españolas decidieron aprovechar una oferta económica para hospedarse en Cracovia, Polonia, pero lo…