Es difícil destacar solo 10 lugares del País Vasco , pero hemos aceptado el reto. Teniendo por descontado que el mejor aval de esta región son las personas que lo habitan, hemos hecho una mezcla de naturaleza, arquitectura, gastronomía y deporte para sintetizar en esta lista cuáles son estos logares vascos que tenemos la suerte de disfrutar. Ahí va, pues, los mejores lugares que tienes que visitar en Euskadi:
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Si existe una playa conocida en el País Vasco, esa es la de la Concha. Si vas a visitar San Sebastián la verás sin dificultad. Popular y señorial a la vez, antiguo lugar para el recreo de la realeza, todos la imaginamos siempre con esas verjas y barandillas blancas. En verano, cuando hace calor y luce el sol, no suele quedar ni un hueco libre para poner la toalla. En invierno, unos cuantos valientes donostiarras se atreven a darse un chapuzón en el Cantábrico.
En realidad podríamos hablar de dos árboles. Por un lado el Árbol Viejo, plantado en 1742 y seco en 1896; y por otro el nuevo, plantado hace poco, el 2 de marzo de 2015 y surgido de una bellota del año 2000 del anterior. El viejo (en la imagen) podemos verle rodeado de un templete que se colocó hace casi un siglo. Están situados delante de la Casa de Juntas en la localidad vizcaína de Guernica y Luno y simboliza las libertades tradicionales de Vizcaya y los vizcaínos, y por extensión las de los vascos.
Un icono para Bilbao. Se trata de un museo de arte contemporáneo diseñado por el archiconocido arquitecto Frank Gehry e inaugurado en 1997. Recibe de media más de un millón de visitantes anuales, y ha causado un impacto extraordinario en la economía y la sociedad vasca, impulsando el turismo en la región, y promoviendo la revitalización de múltiples espacios públicos y privados en la villa, además de mejorar la imagen de la ciudad.
El Kursal es a San Sebastián lo que el Guggenheim a Bilbao. Se trata de un complejo arquitectónico formado por un gran auditorio, una gran sala de cámara, salas polivalentes y salas de exposiciones. Diseñado por otro arquitecto de renombre, Rafael Moneo, se inauguró en 1999, y es, desde entonces, la sede principal del Festival de Cine de San Sebastián, el gran evento que pone a la ciudad en los telediarios de medio mundo cada año.
Bilbao siempre ha rezumado fútbol y por eso su estadio de fútbol, San Mamés, era conocido como ‘la Catedral’. Sin embargo los años no pasan en balde y el paso del tiempo ha requerido de la construcción de un nuevo estadio acorde a los tiempos que corren. Por eso el Nuevo San Mamés es una catedral de la modernidad y el confort, un estadio cinco estrellas que es sin duda uno de los mejores del mundo y una joya de la arquitectura, otra más, para la capital vizcaína.
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El País Vasco no sería el País Vasco sin su gastronomía. Son muchos los platos que podemos enumerar pero nos quedaremos con una opción muy conocida, la de la cultura de los pintxos, muy arraigada en los cascos viejos de las ciudades. Y para culminar esta ‘delicatessen’, nada mejor que acompañarlo de un buen vino de la tierra, que hay muchos.
Y para vinos, los alaveses. Una región llena de campos dedicados a la uva con cientos de bodegas de las que han hecho toda una opción turística. Tanto es así que hasta las bodegas tienen hoteles… ¡y qué hoteles! Para muestra el de las bodegas de Marqués de Riscal, todo un alarde de modernidad que contrasta con los campos de la vid que lo rodean.
Esta localidad es conocida mundialmente por ser uno de los templos del surf a escala planetaria. Miles de surferos llegados desde todos los puntos se dan cita aquí con un objetivo: lanzarse a la mítica ola de Mundaka, de la que dicen los expertos que es la mejor para practicar este deporte.
El País Vasco rezuma arte por cualquier rincón. También en los bosques, como este de Oma, famoso por sus árboles de colores, obra de Agustín Ibarrola. También destacan entre las obras de arte más conocidas el llamado ‘Peine del Viento’, obra de Chillida, en San Sebastián.
Si hay un color que define perfectamente al País Vasco, ese es el verde. La naturaleza vasca nos ofrece cientos de rincones maravillosos como el de la imagen: las cataratas del Nervión en Delika. El famoso río que forma la ría de Bilbao nace entre Alava y Burgos y tras atravesar un pequeño cañón en la Meseta castellana, cae brutalmente hacia la cuenca del Cantábrico a través de cataratas de hasta 300 metros de altura. Eso sí, si tenéis intención de ir a visitarlo, hacedlo en época de lluvias porque en verano suele quedarse sin agua, perdiendo gran parte (obviamente) de su encanto.
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1 Comentarios
Comentario de SUSANA
Publicado el 8 de febrero de 2021
Exelente toda la información