10 pueblos con encanto en Galicia que te enamorarán

Enamorarse de Galicia es realmente fácil. Lo difícil es elegir sólo 10 pueblos con encanto de Galicia cuando hay tantos pueblos capaces de conquistar a cualquiera que los visite. Por eso, en esta ocasión no se trata de elegir cuáles son los pueblos más bonitos de Galicia como si fuera una competición entre ellos, sino de ambientar en 10 escenarios una misma historia de amor: la que todos sentimos por los pueblos con encanto de Galicia.

1. Combarro (Pontevedra)

El casco histórico de Combarro es un ejemplo perfecto para demostrar que la grandeza de un lugar no tiene que ver con su tamaño. El atractivo de uno de los pueblos con encanto de Galicia que no debes perderte hace que le salgan muchos pretendientes, sobre todo en verano. Lo bueno es que Combarro, con sus característicos hórreos y cruceros, no rechaza a ninguno de sus pretendientes.

Combarro (iStock)

2. Tuy (Pontevedra)

Sólo por admirar la catedral de Santa María de Tuy (Tui) ya valdría la pena acercarse a este municipio de la comarca del Bajo Miño. Pero si además sumamos el encanto, por ejemplo, del Paseo de la Corredera, el Paseo Fluvial y los Jardines de Troncoso, incluso hasta nos sobran los motivos para visitar Tuy.

Catedral de Santa María de Tuy (iStock)

3. San Andrés de Teixidó (La Coruña)

San Andrés de Teixidó es otro claro ejemplo de lo que decíamos antes: que el encanto de un lugar no se mide por su tamaño. De hecho, San Andrés de Teixidó es en realidad una aldea con muy pocos habitantes, pero su santuario y sus impresionantes acantilados, los más altos de la Europa continental, lo convierten en un lugar muy especial.

Iglesia de San Andrés de Teixidó (Flickr, Jim Anzalone)

4. Muros (La Coruña)

Muros es capaz de enamorar a cualquiera a primera vista. Encantos, desde luego, no le faltan: la bella estampa de su puerto, la plaza de Santa Rosa o plaza del Cristo, la plaza de la Pescadería Vieja, la iglesia de San Pedro, el santuario de la Virgen del Camino…

Muros (iStock)

5. Betanzos (A Coruña)

Betanzos tiene la ventaja de que puede conquistar al visitante por la vista, con su casco histórico y sus iglesias góticas, pero también por el paladar, con sus famosas tortillas de patata.

Betanzos (iStock)

6. Ézaro (A Coruña)

Ézaro es un rincón mágico de Galicia del que cuesta irse porque allí el tiempo, aunque no se detenga, sí parece que pase más despacio. Sobre todo contemplando la cascada del río Xallas, el único de Europa que desemboca en forma de cascada en el mar.

Ézaro (iStock)

7. Monforte de Lemos (Lugo)

El encanto se puede servir en frascos pequeños… o en uno más grande, como Monforte de Lemos, la capital de la Ribeira Sacra. El castillo medieval con la Torre del Homenaje, el Palacio Condal, el conjunto monumental de San Vicente do Pino, los conventos de las Clarisas y San Jacinto y el colegio de los Padres Escolapios -popularmente conocido como El Escorial de Galicia- son algunas de sus construcciones más representativas.

Castillo de Monforte de Lemos (Flickr, Javier Pais)

8. Mondoñedo (Lugo)

Otro de los muchos pueblos con encanto de Galicia es Mondoñedo, la capital de la comarca de La Mariña Central. Buena parte de ese encanto se concentra en torno a su catedral, con el Palacio Episcopal, el Consistorio Viejo y los soportales de la Plaza de España donde se encuentra la estatua sedente de don Álvaro Cunqueiro.

Catedral de Mondoñedo (Flickr, Lidia Lestegás)

9. Allariz (Orense)

Allariz es uno de esos pueblos cuyo encanto va más allá de la suma de cada una de sus partes. Y eso que si sumáramos cada una de las partes de su bonito casco histórico, el resultado ya sería muy elevado… Si buscas pueblos con encanto de Galicia que visitar, Allariz no puede faltar en tu lista.

Allariz (Flickr, Raúl A.)

10. Ribadavia (Orense)

En algún momento y en algún lugar tendríamos que poner el punto final a estos pueblos con encanto de Galicia de los que es fácil enamorarse. El último de los escenarios de esta historia de amor por Galicia es Ribadavia. Aunque mejor que poner el punto final es poner un punto y seguido y que continúes esta historia visitando Galicia, ¿no?

Ribadavia (Flickr, José Antonio Gil)